Siempre queda un rato para "brincadeiras"...estén tranquilos los amigos de los reptiles, que la culebra no sufrió más que un pequeño berrinche por no poder morder a su supuesto agresor...cosa que acredito hubiera hecho si me hubiera flojeado el pulso...
Para evitar los silvidos de los disparos de los cazadores decidimos subir al puerto de casillas por el collado de la majada del espino, ya alejado de la zona de montería...
los últimos 600 metros de subida al collado son con la bicicleta a cuestas, se nos ocurre que la bajada por el mismo camino puede ser interesante...pero al llegar al collado y descender hacia la otra vertiente aún promete más, es más larga y también bastante vertical...
El tiempo atmosférico que nos acompaña reduce las vistas de ambos valles pero aumenta el misticismo y belleza del paisaje.
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